Trasfondo - Venecia y el mundo más allá II

Dorsuduro

Al oeste de San Marco y al sur de San Polo, Dorsuduro se conoce como "cresta alta", el punto más alto de la ciudad. Esta parte del territorio veneciano está poblada principalmente por trabajadores y artesanos. Por el contrario, también incluye las islas que componen Giudecca, donde se pueden encontrar palacios de muchos nobles venecianos. Dorsuduro también ha estado históricamente vinculado a varias de las sociedades secretas más extendidas de Venecia, con vínculos con la masonería, el Gremio y otras organizaciones clandestinas.

Cerca del Gran Canal se encuentra la zona de San Barnaba, una mezcla única de los dos mundos, de la alta y la baja sociedad. Es aquí donde los de las familias patricias que han pasado por momentos difíciles se han visto obligados a vivir. A pesar de que todavía tienen un título y tal vez incluso un cargo en la ciudad, no tienen nada de su riqueza y propiedades para sustentarlos y, por lo tanto, deben ganarse la vida en el área de renta más baja. Para ello venden frecuentemente sus votos en el Gran Consejo, perdiendo con frecuencia los pagos que reciben esa misma noche en los casinos. Tan conocida es la política mercenaria de estos nobles caídos en tiempos difíciles, que incluso se han ganado un nombre en sus barrios, los Barnaboti.

Unos pocos desesperados aún intentan organizar mascheratas para entretener a los grandes y ricos, pero las delicias de Dorsuduro son pobres en comparación con los espectáculos de Cannaregio y Giudecca. Sin embargo, tiene un creciente atractivo particular, que aún podría hacer que el oportunista Barnabotti prosperase una vez más. Es el corazón del Carnevale a tiempo completo, y bajo el disfraz de las continuas festividades se desata una guerra contra el Gremio. Para los nobles aburridos que buscan no solo un derramamiento de sangre, sino también un desafío de espada a espada, las batallas de Dorsuduro se están volviendo cada vez más atractivas.

Estos conflictos no son nuevos, a pesar de que últimamente se han intensificado gravemente. Un puente sobre el río San Barnaba se conoce como el Puente de los Puños, llamado así por un infame altercado entre los Castellani y Nicoletti en 1585. Aunque tales concursos de puños eran una tradición anual, ahora están prohibidos, pero eso no ha sido un impedimento para que a través de los puentes de la ciudad se produzcan los conflictos más sangrientos en honor a esos ritos antiguos.

Giudecca

Al sur de la parte principal de Venecia, Giudecca se extiende de oeste a este, dividida entre los Sestieres de Dorsuduro y San Marco. El extremo occidental de la isla todavía alberga muchos lugares y plazas opulentos, pero el extremo oriental ha sufrido renovaciones y cambios de propósito recientes. Así como numerosos almacenes destinados a beneficiarse de la reapertura de los muelles y el aumento espectacular del comercio, la parte este de Giudecca también se está convirtiendo rápidamente en un área dedicada a la exploración de la Herida de los Cielos y sus efectos de otro mundo. Los investigadores de lo esotérico están comprando apartamentos y convirtiéndolos en observatorios y laboratorios, mientras que otros peregrinos al borde de la Herida de los Cielos han traído en barco cargas de extraño equipo alquímico y grupos de extravagantes asistentes en el extranjero. Los ocultistas y practicantes de las artes sobrenaturales de China y Japón, India y América han sido atraídos a este distrito. Entre esta actividad, casi ha pasado desapercibido que se ha comprado una gran extensión de Giudecca para el Ospedale, en la que obreros extranjeros han emprendido obras de construcción secretas. Los doctores dicen que están ampliando sus instalaciones y que van a crear un laboratorio y una clínica permanentes. Cada noche, estallan batallas mientras los agentes de las otras partes interesadas de la ciudad, el Gremio en particular, intentan burlar la seguridad de los Doctores y ver qué se tienen realmente entre manos.

Castello

Más al este del continente, Castello es el último y más grande de los sestieri. Lleva el nombre de la Isola San Piero di Castello y ha sido el lugar de muchas inversiones y renovaciones en los últimos años, siendo la ubicación del Arsenal veneciano.

Compuesto por constructores navales y diques secos, el Arsenal es la mayor fuente de empleo de la ciudad, y en los últimos tiempos ha vuelto a convertirse en algo que equipara su antigua grandeza.Fue aquí donde se diseñaron y construyeron las primeras galeras, inmensos buques de guerra que portaban los cañones navales más grandes. El famoso Galileo Galilei exploró durante un tiempo y desde el Arsenale di Venezia el Adriático, y más tarde el Mediterráneo y más allá fue controlado por las flotas de Venecia, creando el Stato da Mar. El Dogo espera nuevamente llevar a Venecia a la vanguardia no solo en potencial marítimo, sino también a la excelencia en el diseño y construcción de barcos.

La producción del arsenal está creciendo nuevamente, lanzando casi un barco al día como lo hizo en su apogeo, cuando los puertos de Inglaterra, Portugal y los Países Bajos pueden manejar tal vez un barco al mes o menos. Lo hace mediante el notable uso del canal, creando una línea móvil de barcos de una etapa de construcción a la siguiente, tan eficiente como una máquina. Inundando los mares con embarcaciones bajo la bandera veneciana se ha estrangulado al resto de potencias comerciales, trayendo a miles de comerciantes y amos de regreso a la ciudad, mientras que los poderes extranjeros saben que ahora deben negociar con el Gran Consejo para exportar sus mercancías a cualquier mercado de Europa.

Este repentino auge de la industria y de la riqueza han creado una mezcla tóxica de oportunidades, armas y codicia. El Gremio había controlado durante mucho tiempo las complicadas áreas de los muelles y a los constructores de barcos, pero los patricios habían traído dinero fresco al área y, a través de una combinación de riqueza y violencia selectiva, están arrebatándole lentamente el control al Gremio. Incluso más que en Dorsuduro, la batalla por el control de la ciudad se libra entre los diques secos y los varaderos de Castello, y se cree que el propio Consejo de los Diez ha patrocinado varios ataques contra el Gremio para asegurar un mayor control de los muelles de la ciudad.

Agregando un ingrediente aún más explosivo a la mezcla, la reciente afluencia de fuerzas del Vaticano que intentaron inculcar la voluntad del Papa en la ciudad se ha visto obligada a fortalecerse en San Piero di Castello. Enviados a la ciudad para purgarla de la oscuridad y establecer el control papal sobre el Dogo, estos sacerdotes guerreros se han encontrado con la resistencia de todos los bandos. Por el momento, deben lamer sus heridas y salir sólo cuando es necesario, pero es tan seguro como que los barcos zarpan del Arsenal, que el Vaticano enviará más mártires e inquisidores para sellar el destino de la ciudad.

San Servolo

Al sureste del continente y de la isla de San Giorgio Maggiore se encuentra San Servolo. Tenía un pasado histórico que albergaba un convento que se convirtió en hospital militar, aunque la institución que se encuentra allí hoy atiende a una gama mucho más amplia de pacientes con necesidades más específicas que las heridas de bala y arma blanca. El Ospedale San Servolo Dei Malati di Mente, para dar su nombre completo, es el primer hospital psiquiátrico de Venecia. Dedicado a comprender y curar las enfermedades de la mente, el Ospedale San Servolo ha estado recibiendo presos durante años, y desde la llegada de la Herida de los cielos, sus salas se han desbordado. El insomnio y el efecto corruptor de la Herida misma han contribuido a un fuerte aumento de la locura en la ciudad. Lejos de rechazar esta afluencia, los médicos del instituto buscan activamente a los Herida-afectados para continuar sus investigaciones. No solo las enfermedades de la mente, sino también las aflicciones de la carne buscan la ayuda de los expertos de Ospedale, y varias veces han consultado con el Dogo sobre obras públicas, por lo que la salud general de la ciudad ha mejorado en los últimos tiempos. Donde alguna vez la aparición de un médico con una máscara de plage podría haber sido una fuente de alarma, hay una creciente y entusiasta aceptación de los habitantes de San Servolo cuando establecen clínicas en toda la ciudad y son cada vez más bienvenidos.

San Michele

Una de las islas satélites más importantes de la ciudad es San Michele, situada al norte de Castello. Ha albergado un monasterio durante la mayor parte de su existencia, y como lazaretto para la cuarentena de pacientes de la plaga. Aunque durante un tiempo los edificios se utilizaron como prisión antes de caer en ruinas. Después de sucesos perturbadores relacionados con la Herida de los Cielos, las oficinas del Gran Consejo han declarado recientemente que no es higiénico enterrar cuerpos en tierra firme, por lo que durante los últimos dos años San Michele se ha utilizado como lugar de sepultura, tanto para nobles como para indigentes.

Hay quienes afirman que esta mayor actividad en la isla no se debe simplemente a la cantidad de entierros que se están llevando a cabo, sino que la isla tiene una población creciente de habitantes más macabros. No es casualidad, dicen, que la isla esté dedicada al portador de la balanza en el día del Juicio Final, San Miguel, y que esos tiempos ya han llegado. En las tabernas del muelle que miran hacia San Michele se oye la historia de figuras tambaleantes que se mueven por los osarios y las tumbas, y de manifestaciones más espantosas que a veces cruzan el agua a la luz de la Herida.

Las dos iglesias de San Michele en Isola y San Christoforo son muy concurridas por dolientes y feligreses, pero por la noche hay un aire desagradable que a veces se lleva el viento. Los narradores experimentados afirman que no es simplemente polvo de tumba y carne podrida, sino el hedor del mismísimo diablo. Quizás no estén tan lejos de la verdad.

Fuente Manual de Carnevale, TTCombat